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A saltos y brincos, un especial del colectivo Sentimos Diverso

Durante años, la sociedad ecuatoriana ha diseñado mecanismos de ocultamiento del abuso infantil. Por culpa del peso de la tradición, por complicidad de las instituciones religiosas, por miedo al qué dirán o simplemente porque hemos naturalizado la violencia a extremos insospechados. El colectivo Sentimos Diverso ha preparado un especial interactivo que resume las conductas del Estado ecuatoriano frente al fenómeno del abuso infantil en el sistema educativo.

Los episodios dramáticos de abusos a estudiantes de escuelas y colegios por parte de sus maestros, con complicidad de las autoridades se volvieron recurrentes en Ecuador, durante los últimos años.

Bastó que el caso de la Academia Aeronáutica Mayor Pedro Traversar (Aampetra) diera la alerta para que, bajo un efecto dominó, empezaran a ver la luz decenas de casos de niñas, niños y adolescentes abusados por maestros en las aulas de clase. El fenómeno llegó a destapar incluso abusos ocurridos hace décadas por parte de sacerdotes católicos, como lo denunció en su momento GK, en Cuenca, en Ambato, y así, toda la institucionalidad del Estado se vio inmersa en un sistemático modelo de silenciamiento.

Hace un año, la Asamblea Nacional conformó la Comisión Aampetra para observar y vigilar las actuaciones del Estado frente al abuso sexual en contra de niños, niñas y adolescentes en el país. El colectivo Sentimos Diverso, con motivo de esta fecha, preparó un especial interactivo que nos muestra cuáles son las acciones gubernamentales que, a saltos y a brincos, se han tomado durante el último año.

Visita el especial completo de Sentimos Diverso aquí o en esta imagen: